Parece que fue ayer

Y, ¿qué diablos?, ¡es que fue ayer!. Me estoy refiriendo al momento en que descubrí los blogs (en adelante bitácoras). Recuerdo que a los escasos dos meses de iniciar esta web, empecé a descubrir este mundillo como tal, en Septiembre de 2002; lo más parecido que conocía por entonces era Barrapunto, y hasta entonces no entendía muy bien qué significaba la palabra «bitácora/blog/weblog». Creo que mi primera inspiración fue Nazaret (por entonces con kittenaz.net) que descubrí la primera vez que visité bitacoras.net. A partir de ese momento no hubo cuenta atrás, fui descubriendo más y más bitácoras, y mientras en Octubre mantenía mi web cerrada acompañando a la sonada protesta contra la LSSI liderada por Kriptopolis, preparaba mi primera (y todavía única) bitácora montada con Greymatter, el primero de los cuatro gestores de contenidos que he tenido. Ese fue el tercer diseño que hice, y el primero que vistió a mi web como bitácora.

Por entonces las bitácoras comenzaban a asomar como una moda, pero el número de ellas era muchísimo menor. El CMS rey era Movable Type aunque yo (para llevar la contraria, no voy a negarlo) acabé usando Nucleus. Tengo muy buenos recuerdos de aquella época de finales de 2002 y principios de 2003, me resulta entrañable recordar los inicios de algo que tres años después aún sigue vivo, con el mismo nombre y las mismas (o más) ilusiones. Hay muchas bitácoras que me recuerdan a esa época: algunas que aún existen como Blogpocket, Denken Über, Egoismo, html life o la de Nando Caballero; otras que se han «reencarnado» como la de Awacate, Rivadulla o Nazaret y algunas que ya no existen como la de let’smarta o Li Stee.

Recuerdo anécdotas curiosas de esa época, como el primer amigo invisible entre autores de bitácoras, el google bombing de denuncia del Prestige, y otras cosas extintas pero muy de moda por entonces como los cliques, los banners personales de 88×31, los diseños con iframe interior… También hay bitacorer@s con los que mantenía una bonita amistad como Pat o Migue, a los cuales sigo apreciando mucho a pesar de que la vida nos haya llevado por caminos distintos.

En el panorama murciano existían muy pocas bitácoras, aunque yo sólo conocía la de Jose Miguel pero actualmente sólo hay que observar cómo se ha multiplicado el número de bitácoras aquí para hacerse una idea de lo que ha crecido este fenómeno durante estos últimos tres años.

Así que dedico esta entrada a vosotros, lectores fieles o visitantes fortuitos, porque aunque siempre he mantenido este espacio como mero entretenimiento personal, me alegra mucho teneros por aquí, y por supuesto me anima aún más a continuar con esto. ¡¡Y aquí se acabó ya la parrafada nostálgica!!