Hace unos días, hablando con Zarem sobre la lámpara de cerdo que aparece en la mesilla de Amelie en la película del mismo nombre, recordé a uno de mis ilustradores favoritos, que no por casualidad es el también diseñador de la susodicha lámpara.
Michael Sowa [de] es un imaginativo y surrealista ilustrador nacido en Alemania que también ha hecho sus pinitos como escritor literario. A través de una pequeña búsqueda en sitios como Flickr, Google Images o Deviantart puedes hacerte una imagen sobre el recorrido de su obra, realmente fascinante y curiosa. Son también suyas las ilustraciones de la habitación de Ameile (el perro, el ave con collar, la mujer con su perro). ¿Uno de mis directores de cine favoritos (Jean Pierre Jeunet) y uno de mis ilustradores favoritos (Michael Sowa) trabajando juntos para hacer mi pelicula favorita? No puede ser casualidad.
Volviendo al tema de la lámpara, no puedo disimular que es para mí un objeto de culto convertido en fetiche… ¡necesito tener esa lámpara!. Pero es una verdadera lástima que sólamente la haya encontrado a la venta a un precio poco asequible en una tienda alemana (inkognito.de) donde por cierto también venden más cosas interesantes de Sowa.
Aunque, ¿qué es asequible o poco asequible cuando hablamos de un fetiche?, es muy difuso ese umbral. Lo que sé es que no me moriré sin tenerla :D
3 Comments
hmmm… me gusta tu blog. En diseño y contenido.
Pues yo igual tengo mis fetiches y efectivamente, valen mucho más que su precio.
Yo ahora estoy en la caza y captura de los peluches C’MONS que salen en la televisión. No son caros… es una ventaja.
Un saludo.
Puede que un día la tengas, a mi me parece horrorosa la verdad, pero vamos.. que como tú eres así de rarito.. tú buscando lámparas y yo libros en primera edición.. así que me callo jajaja. Besikos
Gracias neogenesis, tu crítica me pone de buen humor.
Zarem, que sepas que es la lámpara más bonita jamás creada (vamos, que ni el Ikea) y… ¡a callar! :p